Buenos Aires / Argentina – Las empresas del sector calzado en Argentina se encuentran en una situación crítica debido a la recesión económica que ha impactado fuertemente en las ventas, provocando el cierre y paralización de plantas en todo el país. Esta situación generó una ola de despidos que afecta significativamente a los trabajadores del sector.
La industria del calzado enfrenta una grave crisis por la falta de ventas que ha llevado a muchas empresas a cerrar o reducir sus operaciones, afectando las fuentes de trabajo. La recesión económica obligó a muchas firmas a reducir los turnos de trabajo y realizar despidos masivos.
Un caso emblemático de esta crisis es la empresa Coopershoes, ubicada en Las Flores, provincia de Buenos Aires. A lo largo del año, Coopershoes redujo sistemáticamente su personal. En diciembre de 2023, la empresa contaba con 280 trabajadores, pero la cifra se redujo a menos de 100 tras el despido de 40 empleados en un solo día la semana pasada.
En este contexto, la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado (UTICRA) reclamó a Coopershoes que garantice los derechos de sus trabajadores y advertió a las distribuidoras nacionales Convert y Grimoldi que no frenen la producción, ante rumores de que podrían paralizar distintas fábricas en todo el país. El sindicato logró que los trabajadores despedidos de Coopershoes accedan a las indemnizaciones correspondientes, según las garantías establecidas en las normas laborales vigentes y el convenio colectivo del sector. Sin embargo, UTICRA señaló que la posibilidad de reincorporar a los despedidos es “muy limitada”, debido a que la empresa alega que la crisis económica impide mantener su nivel de producción.
La situación llevó al gremio a considerar la adopción de medidas de fuerza para proteger los derechos de los trabajadores y frenar lo que denominan «industricidio». La continuidad de la producción y la estabilidad laboral en el sector del calzado dependen de la implementación de soluciones urgentes para enfrentar esta crisis económica.